Mercenario
#1 of mercenario
MERCENARIO
Por : NAHUALMORPH
La lluvia había estado cayendo toda la noche, los empapados guardias apenas podían resguardarse, un rayo cayó sobre un árbol en las cercanías, la pequeña llama que se formó se reflejó en un par de ojos ambarinos y se extinguió lentamente, los ojos se movieron en dirección a los guardias de la puerta del castillo.
"Esto deberá ser fácil"
Lentamente, la figura encapuchada comenzó a moverse entre las sombras, hasta que estaba a unos cuantos metros de los guardias, lo ultimo que vieron fue el brillo de la espada que cortó sus gargantas. La figura se despojó de su túnica dejando al descubierto a un lobo gris enfundado en pantalones y capa de cuero negro, algunas correas del mismo material cruzaban por su musculoso pecho. Dentro del castillo, en los aposento reales, el propietario, Lord Danath, forzaba lentamente sus 18 pulgadas de verga de caballo en un joven tigre, el muchacho no parecía ser mayor de los 15 y gemía de dolor mientras su señor lo empalaba, la enorme verga se habría paso a través del apretado pasaje anal. Lord Danath estaba demasiado inmerso en su propio placer para notar las lagrimas corriendo por las mejillas del tigre, el había sido comprado en un mercado de esclavos y esta era su primera noche con el caballo. El tigre tembló cuando el caballo comenzó a mover sus caderas salvajemente.
Afuera del cuarto, dos guardias mas escuchaban los apagados gemidos que provenían del pobre tigre, ellos en realidad no aprobaban el gusto de su amo por los esclavos jóvenes, pero su trabajo no era sermonear a su señor, ellos estaban ahí solo para protegerlo. En el patio principal el lobo observaba la luz proveniente de los aposentos de Lord Danath, rápidamente cruzó el patio y entró en la torre principal, moviéndose como un fantasma y atravesando los corredores, evitando a los guardias, hasta que estaba junto a las puertas de los aposentos de Lord Danath. Los dos osos que hacían guardia se encontraban inconcientemente sobando el incomodo bulto en su entrepierna, ni siquiera sintieron los dardos envenenados que terminaron con sus vidas.
El lobo se aproximó a la puerta y escuchó los sonidos que provenían de la habitación, se asomó por un agujero en la puerta y vio la verga de Lord Danath desapareciendo dentro del culo de un joven tigre, Nahual esperó por el momento preciso y entró silenciosamente al cuarto justo cuando el caballo inundaba los intestinos de su esclavo con su semen. El caballo sintió la fría brisa entrando a través de la puerta abierta y volteó para reprender a quien el creía que seria un guardia.
"Dije que no quería que me molestaran esta noche, ¿Qué qui...?
Se detuvo a media frase, observando al lobo de pie frente a el y con la espada desenvainada, la verga del caballo todavía estaba dentro del tigre.
"¿Quién demonios eres tu?" preguntó Lord Danath
El lobo no contestó, solo dio un paso hacia delante. Danath se dio cuenta de las intenciones del lobo cuando vio los cuerpos de aquellos que se suponía lo protegerían del otro lado de la puerta.
"Guardias!" el grito del caballo lo hizo hundir su aun semi dura verga en el culo del tigre un poco mas, el tigre cerró los ojos y escuchó un sonido extraño, el miembro que lo invadía desapareció, el tigre abrió lentamente los ojos y sintió un liquido tibio en su espalda, miró hacia abajo y vio que las blancas sabanas estaban ahora manchadas de rojo, lentamente volteó a ver al lobo que estaba junto a la cama, la espada del lobo aun goteaba sangre, entonces el tigre vio el cuerpo de Lord Danath en la alfombra en un enorme charco de sangre. El lobo levantó su espada y la bajó con toda su fuerza, cortando la cabeza de Lord Danath limpiamente, la recogió y la metió en una bolsa de cuero, mientras ataba la bolsa a su cinturón se dirigió al tigre, que aun miraba el cuerpo decapitado de su amo.
"Tal ves quieras cubrirte un poco, en unos segundos el lugar estará lleno de guardias" dijo el lobo y acarició la mejilla del tigre suavemente.
El corredor se llenó con el sonido de pasos y el lobo tomó una sabana y la amarró en uno de los postes de la cama, entonces saltó por la ventana hacia el patio principal y corrió hasta que estaba fuera del castillo, la incesante lluvia borraba las pocas huellas que dejaba detrás y la oscuridad de la noche mantenía su silueta en la sombras.
Nahual abrió lentamente los ojos, había pasado casi un mes desde que tomó la vida de Lord Danath, sin embargo, seguía recordando cada segundo.
"Una de las desventajas de ser un mercenario" pensó "Los sueños tranquilos son cosa del pasado"
Estaba echado en una colina junto al camino, disfrutando el calido sol matutino, un ave cantaba en un árbol, el lobo cerró sus ojos de nuevo y su mente revivió otro recuerdo.
Estaba en un pequeño pueblo, y en una pequeña taberna bebiendo tranquilamente, había algunos furs por aquí y por allá, algunos celebraban que uno de ellos se había convertido en padre recientemente, algunos solo tomaban tranquilamente un tarro de cerveza y algunos otros estaban tan ebrios, que se habían dormido sobre sus sillas. Nahual escuchó a los que celebraban y por un momento se preguntó que se sentiría, convertirse en padre, tener alguien a quien amar, alguien por quien vivir, y por quien morir, alguien con quien envejecer. Nahual volteó hacia otro lado y tomó un sorbo de su tarro. No hay muchas oportunidades de convertirse en padre cuando uno prefiere los machos, pero estaría bien tener un lugar al cual llamar hogar, y alguien que lo esperara, pero el no era como los granjeros que estaba observando, o como los soldados que estaban bebiendo en el otro extremo de la taberna, el era un mercenario, un asesino que no se podía permitir tales cosas como el amor o una familia, era su destino vagar por el mundo, vendiendo sus letales habilidades a quienquiera que pudiera pagarlas, hasta el día, que indudablemente llegaría, en que alguien a quien el debía matar, terminaría matándolo a el, Anual sabia muy bien que ese día llegaría, pero estaba seguro de que no seria pronto.
"¿Pensando en cambiar de profesión?" preguntó una voz a su derecha y volteó a ver a una hiena rayada bebiendo junto a el.
"¿Qué podría saber usted sobre mi profesión señor?" preguntó Nahual sosteniendo el mango de su espada instintivamente con su mano derecha mientras sostenía su bebida con la izquierda.
"Se mucho sobre usted señor Nahual, tengo un trato para usted, déjeme conseguirle otra bebida y podremos discutirlo en una mesa.
Cinco minutos después ambos estaban un una mesa bastante alejada de los demás.
"Se como se gana la vida, por eso estoy aquí" Dijo la hiena "Escuché que fue usted quien le dio a Lord Danath su nuevo estilo de afeitarse."
"Tal vez lo fui" dijo Nahual "Quien podría decirlo?"
"La misma fursona que te pagó los 500 oros por la cabeza de Danath, su ex -esposa, ¿Quiere un poco mas de cerveza? ¿Tal vez algo mas fuerte?"
"Ella debe haber olvidado mencionarle que me gusta ir directo al grano"
"Muy bien, así esta el asunto" dijo la hiena "Necesito que mates a alguien para mi, en el reino de Kalorath, dos mil oros"
La ceja izquierda de Nahual se arqueó un poco, dos mil oros era una fortuna, suficiente para vivir en la opulencia por el resto de sus días. El blanco debía ser muy importante, o muy peligroso, pero no importaba, el nunca había rechazado un trabajo.
"Dos mil oros es mucho dinero, así que puedo asumir que no será una tarea fácil, dime mas y decidiré si lo hago o no" dijo Nahual
"Debes matar a un dragón, por eso es tal cantidad, su nombre es Grekko, puede ser difícil de hallar, vive en algún lugar cerca de Sarooth, a dos semanas de distancia, sus escamas son café rojizo y su pecho y abdomen son rojos, encontraras que sus ojos son muy interesantes, tendrás que matarlo y traerme no su cabeza, sino sus genitales." La hiena arrojó una bolsa en la mesa "Mil oros, te daré el resto cuando termines el trabajo"
Nahual tomó la bolsa y se incorporó
"Dos semanas para ir, dos semanas para regresar, dos mas para encontrarlo y hacer el trabajo, tendrás noticias mías dentro de seis semanas, si eso no pasa significará que he fallado."
Nahual comenzó a dirigirse hacia la salida.
"Espera" dijo la hiena "¿No quieres saber por que quiero que hagas esto, o siquiera mi nombre o como encontrarme?"
"No me importan las razones que tengas para contratarme, y si no pudiera encontrarte cuando lo quisiera, entonces yo no seria quien tu buscas... Jarhed"
"Así que sabes quien soy"
Nadie contestó y la hiena levantó su mirada, el lobo había desaparecido.
"Es tan bueno como los rumores dicen"
Nahual abrió los ojos y lentamente se incorporó, llevaba ocho días en el camino, había un pueblo unas cuantas millas adelante, había estado caminando sin detenerse excepto para dormir algunas horas. Sarooth quedaba a dos o tres días, así que decidió tomar por lo menos una buena noche de descanso. Nahual levantó su brazo izquierdo y olfateó su axila, su nariz se contrajo y el lobo estornudó.
"También me serviría un baño"
Comenzó a caminar de nuevo.
Era un pueblo tranquilo, mientras Nahual caminaba por la calle principal notó que algunos furs se le quedaban viendo, pero no les prestó atención. Vio una posada pero no era del tipo que buscaba, así que caminó por los callejones mas pequeños, hasta que finalmente encontró lo que buscaba, era otra posada, mas pequeña que la de la calle principal, pero mas discreta, y con todos los servicios que estaba buscando, agua caliente, comida y servicio de acompañantes de ambos sexos. Nahual entró al lugar e inmediatamen6te se dirigió al mostrador, un zorro macho estaba hablando con otro lobo.
"Necesito un cuarto para esta noche" dijo Nahual y colocó cinco oros en el mostrador.
El zorro los observó con sorpresa, eso alcanzaba fácilmente para un mes.
"¿Solo por esta noche señor?"
"Si, y requiero un acompañante, un caballo macho, si hay alguno, regresaré en una hora, dile que tenga un baño caliente listo"
"Por supuesto señor."
Nahual salió de la posada y comenzó a caminar de nuevo por la calle principal. Encontró una taberna y fue directo a ella, entró y ordenó una cerveza, entonces comenzó a hacerle platica al encargado, tratando de sacarle información. Una hora después, decidió que era hora de irse, ya tenía algunas pistas que seguir, así que regresó a la posada.
"Todo esta listo señor" dijo el zorro "su cuarto es el ultimo del segundo piso, es el mejor que tenemos"
Nahual sintió y subió las escaleras. Entró en su habitación, había una cama y una mesa con tres velas, a su derecha había una puerta que guiaba a lo que adivinó seria el baño, ya que una nube de vapor salía del cuarto. Nahual entró al baño y vio a un caballo marrón que solo tenia puesto un taparrabo arrodillado junto a una tina llena con agua caliente, el caballo vio a Nahual y se incorporó.
"Su baño esta listo señor, ¿Desea que le ayude a quitarse la ropa?"
"Eso puedo hacerlo yo, pero me ayudarás a bañar, ¿Cuál es tu nombre?"
"Adam señor"
Nahual se quitó la capa, seguida por las correas que sostenían su espada y otras armas, después desabrochó su pantalones de cuero y se los quitó, ahora estaba desnudo frente al caballo.
"Lava mi espalda" dijo Nahual.
Adam se arrodilló junto a Nahual y comenzó a enjabonar su espalda, una vez que terminó con su espalda, avanzó hacia el musculoso pecho del lobo, Nahual no hizo ningún intento de detenerlo, así que el continuó tallando su pecho y brazos. Adam regresó al pecho de Nahual y lentamente continuó hacia abajo, acariciando el firme abdomen de Nahual, se preguntó que debia hacer y volteó a ver al lobo, pero este tenia los ojos cerrados, Adam decidió saltar a los pies y piernas de Nahual. Adam gentilmente recorrió cada centímetro de los pies y piernas del lobo hasta que estuvieron limpios, después volteó a ver al lobo de nuevo.
"Termina" dijo Nahual aun sin abrir los ojos.
Dudando un poco, Adam acercó su mano al escroto del lobo y comenzó a acariciarlo, pasó su mano sobre los testículos y la vaina, que palpitó un poco por el roce. Continuó tallando los genitales de Nahual hasta que estuvieron bien limpios.
"Pareces disfrutar eso muchacho" dijo Nahual abriendo los ojos.
Adam descubrió la mirada de Nahual y descubrió que su verga estaba completamente dura y haciendo el taparrabos hacia un lado.
"Nos encargaremos de eso pronto" dijo Nahual incorporándose "Ahora ayúdame a secarme"
Adam de incorporó y tomó una toalla de una silla cercana, su verga se mecía con cada movimiento, deslizó la toalla por todo el cuerpo de Nahual, prestando especial atención a la entrepierna. La verga de Nahual comenzaba a asomarse por su vaina. Nahual se dirigió a la cama y le hizo señas a Adam para que lo siguiera. Adam se acercó a la cama, Nahual extendió un brazo y acarició con su mano la parte de debajo de la dura verga de Adam, quien lanzó un gemido, Nahual se inclinó un poco y comenzó a lamer las pulgadas de negra carne de caballo, Adam sintió un escalofrió y comenzó a acariciar las orejas de Nahual, el lobo usó su mano derecha para masturbar suavemente lo que no lamía y su otra garra sostenía los testículos de Adam, Nahual podía sentir las gruesas venas de la verga al pasar sobre ellas con su lengua, enterró su nariz en el pubis del caballo e inhaló, llenando sus sentidos con la fuerte esencia del caballo. Abrió la boca y se introdujo tanto como le fue posible de aquel suculento miembro y comenzó a chupar. Adam volteó sus ojos en éxtasis, el era un prostituto y estaba acostumbrado al sexo oral, pero este lobo lo estaba haciendo con una fuerza que el nunca había sentido, sintió sus testículos tensos contra su cuerpo, los jugos dentro de ellos a punto de ebullición, solo unos cuantos segundos y... de pronto el fantástico hocico ya no estaba ahí, miró hacia abajo y vio a Nahual recostado en la cama, con su puntiaguda verga de lobo totalmente al descubierto.
"Tu turno caballito"
Adam se arrodilló y lentamente acercó su boca al polo de carne, con su lengua recogió el claro fluido que salía de la punta, alentado por el sabor, lamió la verga entera y usó sus manos para acariciar los suaves testículos de Nahual, Después de unos cuantos minutes de lamer y chupar, Nahual re recostó de nuevo, arrastrando a Adam consigo en un apasionado beso.
"Siéntate en mi verga" le susurró Nahual a Adam.
Adam se acomodó de modo que la verga de Nahual rozara su ano, después de fue bajando sobre el puntiagudo miembro hasta que estaba sobre sus rodillas y el miembro de Nahual estaba totalmente enterrado en su culo. Adam comenzó a moverse, haciendo gemir de placer a Nahual, la verga de Adam se balanceaba sin control y empapaba el pecho y abdomen de Nahual con liquido pre seminal, Nahual levantó una mano y comenzó a jugar con la verga del caballo, Adam podía sentir que el bulbo en la base del pene de Nahual comenzaba a hincharse y hacia cada embestida un poco mas dolorosa, pero no le importó y siguió bajando sobre aquella verga, de pronto, Nahual sujetó a Adam por sus hombros y lo empujó hacia abajo, enterrando su bulbo dentro del culo de Adam, el bulbo se hinchó aun mas y unió a los dos furs. Adam sintió el calido chorro del semen de Nahual dentro de el y esto lo llevó hasta el limite tambien, su verga explotó sobre el pecho y la cara de Nahual, el lobo abrió su boca, atrapando algunos chorros del semen del caballo y saboreándolos, finalmente, sus orgasmos terminaron y Adam se dejó caer sobre el pecho de Nahual, aun unido a el, esparciendo el semen de su orgasmo sobre ellos.
Adam se despertó la mañana siguiente sintiendo el culo adolorido, habían tenido sexo durante casi toda la noche. Buscó a Nahual, pero la habitación estaba vacía. Lentamente se incorporó sintiendo un ligero dolor, no había nada que indicara que Nahual había estado ahí excepto una pequeña bolsa sobre la mesa, Adam abrió la bolsa y descubrió que estaba llena de monedas de oro, al menos 50. Adam buscó sus ropas, se vistió tan rápido como pudo y bajó las escaleras, le preguntó al zorro por Nahual.
"Se fue muy temprano sin decir una palabra"
Adam miró hacia la puerta, combatiendo los deseos de correr detrás del lobo, en vez de eso, regresó a la habitación y comenzó a prepararse para el siguiente visitante.
Nahual estaba de nuevo en el camino, el pequeño pueblo se perdía en la distncia, mientras avanzaba por el camino, Nahual continuaba pensando en el caballo con quien había pasado la noche, aunque el sabia que el caballo solo hacia su trabajo, Nahual se sintió bien cuando despertó con sus brazos alrededor del calido pelaje del pecho de Adam, era una sensación extraña, pero ya no podía negarlo, se sentía solo, había comenzado a sentirse así poco después de que mató a Lord Danath. Había estado pensando en establecerse, buscarse una pareja y tal ves tener una vida normal. A los 30 años aun era joven y no le seria difícil encontrar algún pedazo de tierra con el dinero que había ganado. Pero sabia que eso no era posible, tarde o temprano sentiría el llamado de nuevo. Nahual había tenido este estilo de vida desde que era un cachorro, no podía dejarlo tan fácil. El tenia un don, una habilidad natural para el combate, no podía aguantar un solo día sin la necesidad de sostener una espada, aunque fuera solo para practicar, así que debía continuar, tomando cualquier trabajo que estuviera bien pagado e involucrara altos riesgos, durmiendo en campo abierto y teniendo aventuras de una sola noche ocasionalmente. Su mente regresó al caballo de nuevo, hubiera estado bien...
Dos días después, Nahial entraba en Saaroth. Era una pequeña villa con casas por todos lados y las calles llenas de furs. Mientras caminaba, de ves en cuando alguien volteaba a verlo, pero no sentía hostilidad, este parecía ser un pueblo muy amigable. Recordó la información que habia obtenido en el otro pueblo, acerca de un dragón que vivía en una pequeña casa en las afueras de Saaroth, y que era una especie de protector del pueblo. "esto podría hacer las cosas un poco difíciles" pensó Nahual. Caminaba por el pueblo, memorizando las calles y los establecimientos, planeando posibles rutas de escape. Entró a una tienda a comprar algo, una joven zorrita lo recibió.
"Buenos días señor, ¿Qué puedo hacer por usted?"
"Buenos días, estaba buscando una capa de terciopelo y tal vez un collar de plata..."
"¿Terciopelo?" preguntó la zorra mirando la capa de cuero negro de Nahual.
"No es para mi, es un regalo para un viejo amigo, tal ves lo conozcas, su nombre es Grekko, es un dragón con escamas marrón y pecho rojo, no lo he visto en años y lo quisiera sorprender, pero ni siquiera recuerdo donde vive."
"Oh, conoces a Grekko, estoy segura de que se alegrará de verte, el no recibe muchas visitas, vive en una casa afuera del pueblo" Dijo la zorra mientras buscaba en un baúl "podrás llegar si caminas por el camino principal, veras un pequeño sendero a tu derecha, solo síguelo y estarás ahí en unos cuantos minutos, aquí tienes"
Le entregó a Nahual una capa de terciopelo rojo.
"Ahora déjame buscar el collar" dijo la zorra y entró en un cuarto.
Nahual no perdió tiempo, dejó diez oros en el mostrador y corrió hacia el camino principal. Quince minutos después, estaba en el pequeño sendero que guiaba a la casa de Grekko. Nahual se detuvo cuando vio un pequeño edificio adelante. El lobo salió del sendero y se escondió en los arbustos, se aproximó un poco mas, era una casa simple, con una pequeña cerca, un gran jardín con muchos árboles y flores. Nahual comenzó a divagar de nuevo y se preguntó si algún día podría tener una casa así. De pronto, la puerta de madera se abrió y obtuvo la primera vista de su objetivo. En la entrada se encontraba Grekko, tenia que ser el, era un dragón grande, media fácilmente mas de 2 metros de estatura, muy por encima del metro ochenta de Nahual, su cuerpo estaba cubierto de escamas café rojizo y su pecho y abdomen estaban cubiertos de escamas rojas mas grandes, justo como la hiena había dicho. Nahual vio a que se refería Jarhed cuando dijo que los ojos de Grekko eran curiosos, uno era café claro y el otro era azul. "Muy peculiar" pensó Nahual. Notó que el dragón estaba usando un viejo par de pantalones cortos, no había ningún bulto visible. "Demonios" pensó "debe tener órganos internos, será un trabajo muy sucio cortar esos" Vio que el dragón caminaba hacia el jardín y comenzaba a quitar las hojas muertas de una planta. Nahual se preguntó si debería atacar ahora o esperar a ver que mas podía averiguar de este dragón, decidió hacer lo ultimo, así que buscó un lugar conveniente y se acomodó para ver al dragon cuidando sus plantas. Nahual vio que Grekko caminaba hacia la parte de atrás de la casa, así que decidió cambiar de lugar, se movió de un árbol a otro hasta que tuvo una buena vista de la parte trasera de la casa. Grekko estaba cortando madera, Nahual vio que el dragón bajaba un hacha y la madera se partía sin esfuerzo, notó como los enormes músculos del dragón se contraían y la forma en que sostenía el hacha. Entonces se dio cuenta, este dragón tenia habilidades para pelear, probablemente había estado en muchas batallas, vio que manejaba el hacha como solo pocos podían hacerlo, también notó que el dragón no tenia cicatrices visibles, casi como el, esto significaba que era un muy buen guerrero. Pronto, el montón de madera quedó reducido a una pequeña pila de troncos, el dragón arrojó el hacha y se limpio la frente. Nahual comenzó a pensar que su objetivo era muy atractivo. Escuchó a alguien venir por el sendero, aparentemente Grekko también escuchó, ya que estaba caminando hacia el frente, Nahual vio que la figura corría al ver aparecer a Grekko. Era la zorrita de la tienda. Nahual se acercó tanto como pudo y trató de escuchar.
"Hola Mary, ¿Qué te trae por aquí?" preguntó Grekko sonriendo.
"Tu amigo olvidó esto" dijo ella y le entregó un pequeño paquete al dragón.
"¿Mi amigo?" preguntó Grekko sorprendido.
"Si, un lobo gris pasó por la tienda esta mañana diciendo que era un viejo amigo tuyo, compró algunas cosas y dijo que eran un regalo para ti, pero olvidó esto"
Grekko miró al paquete y después a la zorra.
"Oh si, ya recuerdo, está en el pueblo arreglando algunos asuntos, pero regresará pronto, gracias por haber venido hasta acá"
"No hay problema" dijo Mary "Discúlpame por no haber venido a visitarte últimamente, pero he tenido mucho trabajo, ahora que tu amigo está aquí ya no te sentirás tan solo"
"Muchas gracias Mary" dijo Grekko acariciando la mejilla de la zorra. "Ahora, si me disculpas, debo tomar un baño antes de que mi amigo regrese"
"De acuerdo, te veré después" dijo Mary y comenzó a correr de regreso al pueblo.
Nahuyal vio que el dragón entraba a la casa con el paquete aun en sus garras, salió algunos minutos después, cargando dos barriles y comenzó a caminar hacia el bosque. Nahual no estaba seguro de que hacer, de seguro el dragón se había dado cuenta de que algo andaba mal, pero seguía actuando como si no hubiera pasado nada. Decidió seguirlo, Nahual caminó a través del bosque hasta que vio un claro, había un pequeño estanque escondido entre la densa línea de árboles, Grekko estaba de rodillas, llenando los barriles con el claro liquido. Cuando los barriles estuvieron llenos el dragón se desnudó y se metió al agua. Nahual observaba mientras el dragón se bañaba en las cristalinas aguas, había estado en lo cierto, entre las piernas del dragón había un pequeño saco y una ranura ligeramente abultada, comenzó a pensar como se vería el dragón excitado, y lo que podrían hacer si se hubieran conocido en diferentes circunstancias. Ni siquiera sabia si a este dragón le gustaban los machos, pero estaba seguro de que matarlo seria una tarea difícil, física y emocionalmente.
"por que no sales para que podamos terminar esto?" escuchó decir al dragón, Nahual vio que Grekko miraba hacia el lugar donde estaba escondido "Has estado viéndome toda la mañana, ya debes haber pensado en alguna forma de matarme"
Nahual salió de entre los árboles.
"Muy impresionante" dijo "Sabes por que estoy aquí, pero... ¿Por qué decidiste enfrentarme aquí y ahora? ¿No preferirías morir en tu casa? ¿Tal ves en tu jardín y con la dignidad de algo de ropa?"
"Que considerado eres" dijo Grekko sonriendo mientras comenzaba a caminar hacia Nahual "Pero definitivamente no seré yo el que muera hoy"
"Mírate, estas desnudo, desarmado y cansado después de un día de trabajo, no seria justo"
Grekko arrancó una rama de un árbol cercano.
"Ahora no estoy desarmado."
Pateó una pequeña roca y golpeó a Nahual en el hocico, el lobo estaba sorprendido, no había visto venir el ataque, pero su sorpresa se convirtió en enojo cuando probó su propia sangre.
Nahual desenvainó su espada y atacó, cuando la espada estaba a unos centímetros de la cabeza de Greco, el dragón arqueó el cuerpo y esquivó el corte, al mismo tiempo, lanzó una patada a las costillas de Nahual con su pierna derecha. Nahual sintió el golpe en su costado izquierdo, pero antes de que pudiera siquiera quejarse de dolor, sintió otro golpe en la cara. Grekko se movía muy rápido, esquivaba fácilmente cualquier ataque de Nahual y contraatacaba, Nahual detuvo sus ataques.
"Definitivamente eres un guerrero nato, ¿hace cuanto que dejaste el ejercito?"
"Nunca estuve en el ejercito" dijo Grekko.
"Un simple granjero no podría moverse como lo haces tu" dijo Nahual atacando de nuevo.
Grekko siguió bloqueando sus ataques con la rama.
"Yo era un mercenario, justo como tu"
La respuesta hizo que Nahual bajara su guardia por un momento y Grekko se arrojó hacia adelante con toda su fuerza, arrojando a Nahual contra un árbol. Para cuando Nahual quiso reaccionar, su espada ya no estaba en sus manos, levantó la vista y vio al dragón sosteniéndola. El desnudo dragón se veía hermoso, de pie, sosteniendo la espada y mirando a Nahual.
"Sabes lo que sigue ¿Verdad?" pregunto Grekko.
"Si, solo hazlo"
Los gritos de Mary los interrumpieron.
"Grekko!"
Grekko fue hacia un árbol donde estaban sus pantalones cortos y se los puso, Nahual permaneció en el piso.
Mary apareció corriendo entre los árboles.
"Grekko!... Bandidos! Están atacando la villa!"
Los ojos de Grekko se encendieron con ira y volteó a ver a Nahual.
"Tendremos que terminar nuestro pequeño ejercicio después" dijo Grekko y arrojó la espada de Nahual. Grekko corrió hasta su casa seguido por Mary. Nahual se incorporó y recogió su espada. Por un momento no hizo mas que mirar sus manos. Habia sido derrotado, había sido derrotado en un trabajo que no permitía fallas, sin embargo, seguía vivo. Su presa lo había perdonado, y ahora no sabia que hacer, debería estar muerto, pero Grekko había decidido dejarlo vivir. Ahora Nahual estaba en un problema, su propio honor no le permitiría intentar matar al dragón de nuevo. Había perdido y debía reconocer su derrota, pero no podía dejar el trabajo sin terminar. Decidió encargarse de eso después, se puso de pie y comenzó a correr a través del campo hacia la villa.
La tienda donde Nahual había comprado la capa se estaba incendiando, afuera había una pareja de viejos zorros abrazada, Mary y Grekko llegaron justo cuando la fachada se venia abajo.
"Grekko, gracias a los dioses que llegaste" dijo el viejo zorro "Llegaron de pronto y destruyeron todo"
Grekko llevaba puestos un par de pantalones de tela y estaba protegido con rodilleras y perneras de metal, además de un peto pequeño, llevaba una espada enfundada en la cintura.
"¿Dónde están?" preguntó
Antes de que el zorro pudiera contestar, una flecha voló desde las sombras, Grekko la atrapó unos centímetros antes de que tocara el pecho del viejo zorro.
"No hemos ido a ningún lado"
Grekko trató de ubicar de donde provenía la voz, pero no era fácil, había gritos en la calle principal y mucho humo en el callejón. Grekko cerró los ojos y se concentró, una segunda flecha salió de entre las sombras, Grekko la atrapó de nuevo y la arrojó de regreso, un león emergió entre las sombras, su mano izquierda presionaba una cortada sobre su brazo derecho.
"Hijo de puta!"
El león desenvainó su espada y atacó al dragón, Grekko evadió el ataque con facilidad y contraatacó antes de que el león pudiera voltear, la espada de Grekko dejó un enorme corte en uno de los costados del león y este cayó muerto.
"Este lugar es muy peligroso" dijo el dragón "Tenemos que irnos"
El dragón comenzó a caminar hacia la calle principal seguido por los zorros, lentamente comenzaron a avanzar por el caos en que se había convertido la calle principal. Los asaltantes atacaban todo lo que se movía, los pobladores defendían a sus familias lo mejor que podían. Grekko continuaba luchando cada vez que algún bandido se acercaba a los zorros. Peleando contra dos o tres enemigos al mismo tiempo. Cuando llegaron a una enorme casa donde la mayoría de las mujeres y los niños se habían reunido, Grekko aun no tenia ninguna herida.
"Vayan adentro, estarán a salvo"
La familia de zorros entró a la casa y la puerta se cerró. Grekko regresó a la calle principal donde un oso ya estaba esperándolo. Comenzaron a pelear y pronto la espada de Grekko se hundió en el pecho del oso. Grekko tomó su espada y la del oso y continuó peleando, la mayoría de los asaltantes ya estaban muertos o capturados. Grekko regresó al pequeño callejón donde estaba la tienda, el fuego casi se había extinguido, el lugar no se veía tan mal, parece que podía ser reparado. Justo entonces seis furs aparecieron a ambos lados del callejón.
"Que huevos tienes dragón" dijo una rata sosteniendo un hacha "Te vi matar a muchos de mis hombres, si no fuera por ti hubiéramos destruido la villa entera sin problemas."
"Así que tu eres el líder" dijo Grekko adoptando su posición de batalla.
"Si yo soy" dijo la rata y se arrojó hacia Grekko junto con los demás furs. Grekko intentó evitar los ataques, pero eran demasiados enemigos, por cada golpe que esquivaba recibía uno, cuando bloqueó un ataque con su brazo y hundió su espada en la garganta de otro fur, la rata atacó y enterró un puñal en el costado izquierdo de Grekko, el dragón rugió por el dolor y alguien lo golpeó en la cabeza. Grekko cayó al suelo y su visión se hizo borrosa, la rata se colocó frente a el y levantó su hacha, Grekko solo cerró los ojos y esperó por el impacto, pero este nunca llegó, abrió sus ojos y vio una espada clavada en el pecho de la rata. Grekko conocia esa espada, la habia sostenido esta tarde, Grekko volteó a tiempo para ver a Nahual de pie detrás de el, su quijada cerrada alrededor de la garganta de un chacal. Nahual desgarró la garganta del chacal y volteó a ver a los tres furs restantes. Todos atacaron al mismo tiempo, con un movimiento rápido, Nahual arrojó una daga que llevaba oculta a uno de los furs, clavándosela entre los ojos. Cuando los otros levantaron sus espadas, Nahual se movió hacia la izquierda y golpeó a uno de ellos en el pecho, el golpe le sacó el aire de los pulmones y lo hizo soltar su espada, Nahual la atrapó antes de que tocara el suelo y la usó para cortar al pobre fur por la mitad. Ahora solo quedaba uno, un lagarto. El lobo estaba cubierto de sangre, toda ella de sus enemigos. Las sangrantes mandíbulas del lobo formaron una sonrisa siniestra y el miró al lagarto justo en los ojos. El lagarto hizo un ultimo ataque desesperado, las espadas chocaron una, dos, tres veces, en el cuatro ataque, Nahual esquivó al lagarto y por un momento ambos peleadores quedaron de espaldas uno al otro. Grekko, que aun estaba en el suelo tratando de mantener su herida cerrada, había visto todo el combate, el pensó que Nahual usaría esta oportunidad para clavar su espada en la espalda de su oponente, pero no lo hizo, en lugar de eso, se movió para darle al lagarto la oportunidad de enfrentarlo, entonces enterró la espada en el estomago del lagarto, Nahual alzó la espada, separando la carne del lagarto hasta el pecho. Nahual volteó a ver a Grekko y caminó hacia el todavía sosteniendo la espada. Grekko no se movió, pero si esperó un ataque mortal de Nahual, pero el lobo arrojó la espada y le ofreció una garra al dragón herido.
"¿Por qué?" preguntó Grekko, sosteniendo la garra del lobo.
"Vida por vida" dijo Nahual mientras ayudaba a Grekko a levantarse "No me mataste cuando tuviste la oportunidad, ahora estamos a mano."
La espada de Nahual aun estaba clavada en el pecho de la rata, el lobo la sacó y la limpió en el cadáver, luego la envainó.
"Salgamos de aquí, hay que encargarse de esa herida tuya, déjame ayudarte"
Nahual hizo que Grekko pasara un brazo por su cuello y lo ayudó a caminar. Aun había algunas peleas en la calle, algunos de los bandidos habían escapado, los demás estaban muertos, capturados o luchando inútilmente contra grupos de tres o cuatro pobladores enojados. Había uno en particular, un enorme jabalí que estaba rodeado por unos 10 furs, alrededor del jabalí había cinco furs muertos y nadie se atrevía a enfrentársele. Nahual vio esto y le ayudó a Grekko a recargarse contra un muro.
"Ahorita regreso"
Nahual caminó hacia el grupo de furs, se hicieron a un lado y dejaron que Nahual entrara el circulo. Tan pronto como el jabalí lo vio, se lanzó hacia delante apuntando su lanza hacia el pecho de Nahual. En una fracción de segundo, Nahual tomó la punta de la lanza con su mano derecha, y con la izquierda, arrancó la lanza de las manos de jabalí, la muñeca de Nahual giró y la punta de la lanza entró por la garganta del jabalí, Nahual presionó hasta que la punta salió del otro lado. El lobo dio media vuelta y comenzó a caminar hacia Grekko.
"¿Por qué estas haciendo todo esto?" preguntó el dragón.
"¿Qué?"
"Todo esto, ayudarme a mi, a ellos, estoy muy agradecido, pero no lo comprendo."
Seguían caminando mientras hablaban, Nahual aun estaba ayudando a Grekko a caminar.
"No tengo nada contra ellos" dijo Nahual "ellos no significan nada para mi, pero si no los ayudo, tu intentaras hacerlo y en tu condición estarías muerto en menos de diez minutos, no puedo permitir eso, debes sanar, para que podamos pelear de nuevo."
"Ya veo" dijo Grekko "Estas ayudando a la villa solo porque los bandidos están interfiriendo con tu trabajo, ¿no seria mas fácil dejar que ellos me mataran?"
"Yo sigo un código de honor muy estricto, no dejaré que nadie mas te mate, y no pelearé con un guerrero herido, tendremos una pelea justa, y si eso significa que tengo que cuidarte hasta que hayas sanado y tomar tu lugar como el protector de la villa, lo haré"
"Grekko miró a Nahual a la cara, sabia que el lobo estaba diciendo la verdad, a pesar de ser un mercenario, Nahual era un fur honorable.
"Gracias" fue todo lo que el dragón pudo decir antes de desmayarse por la falta de sangre.
Lo primero que Grekko sintió fue una calidez envolviendo su cuerpo. Lentamente abrió sus ojos y descubrió que estaba acostado en su cama, cubierto con una sabana. Trató de moverse y lanzó un leve gemido por el dolor en su costado, hizo las sabanas a un lado e inspeccionó su herida, había sido limpiada y suturada. Grekko se llevó las manos a la cabeza, aun le dolía un poco, pero no parecía haber mucho daño. Al alejar mas las sabanas, Greco se dio cuenta de que estaba desnudo.
"Si te sigues moviendo así, se te abrirán las puntadas" dijo Nahual, de pie en el marco de la puerta y sosteniendo una bandeja.
"¿tu hiciste esto?" preguntó Grekko
"Te dije que te cuidaría" dijo Nahual colocando la bandeja en una mesa cercana y sentándose en una silla junto a la cama "Después de que te desmayaste te llevé a la casa donde dejaste a esa zorra, mientras curaban tus heridas, los asaltantes fueron derrotados completamente, después de eso te traje aquí, todo eso ocurrió hace dos días"
"Gracias" dijo Grekko mirando a Nahual a los ojos.
Nahual se sonrojó un poco y luego se levantó y tomó un plato con sopa de la bandeja.
"Aun estas muy débil, come algo y tal ves te deje levantarte mañana"
Nahual le entregó el plato al dragón y salió del cuarto.
Grekko despertó en medio de la noche, no recordaba haberse vuelto a dormir, lentamente se incorporó, ya no le dolía mucho, estaba sanando muy rápido, lentamente avanzó fuera del cuarto y hacia la sala. Vio a Nahual durmiendo en un sillón cerca de la chimenea. Grekko se aproximó en silencio al lobo dormido, se veía cansado, pero al mismo tiempo en paz, tenia una sonrisa en su cara, parecía estar teniendo un buen sueño, así que decidió no molestarlo y regresar en silencio a su cuarto.
La mañana llegó finalmente y Nahual se estiró en el sillón, abrió sus ojos y se quedó inmóvil por un momento, recordando su sueño. El y Grekko en un campo cubierto de flores, solo ellos dos riendo y abrazándose. Eso era todo, la gente de la villa le había ofrecido su gratitud y su amistad, y Grekko le había hecho sentir algo que nunca había sentido. Finalmente Nahual había tomado una decisión. Escuchó risas afuera y se levantó para ver quien era. Cuando abrió la puerta, vio a Grekko y Mary sentados en una banca de madera bajo un árbol, el dragón vio al lobo y lo invitó a que se les uniera.
"Deberías estar descansando" dijo Nahual mientras caminaba hacia ellos.
"Yo sano muy rápido, me siento mucho mejor ahora"
"¿Por qué no me despertaste?"
"Parecía que disfrutabas tu siesta, además te veías cansado"
"Estoy segura que lo estaba" dijo Mary "Ha estado ayudándonos a reconstruir la villa todo este tiempo"
"Si, bueno... me cansé de ver a Grekko dormir todo el tiempo" dijo Nahual evitando la mirada de sorpresa de Grekko.
"Bien chicos, tengo que irme" dijo Mary "Aun hay muchas cosas que hacer, cómanse su pastel y cuando se sientan mejor vayan a visitarnos, tenemos una sorpresa para ustedes, Adiós!"
"¿Cómanse su pastel?" preguntó Nahual mirando a Grekko.
"Ella hizo un pastel y nos lo trajo" explicó Grekko "está en la cocina"
Ambos entraron a la casa.
"¿Por qué les estas ayudando a reconstruir el pueblo?" preguntó Grekko cerrando la puerta tras el "dijiste que no te importaban"
"Ya te lo dije" dijo Nahual sin voltear a verlo "me cansé de verte dormir"
"Dame un poco mas de crédito" dijo Grekko "habrás engañado a Mary, pero no a mi. Pelearemos esta tarde, tal vez me mates t regresarás a cobrar tu recompensa con Jarhed, ya que estoy seguro que es el quien te contrató, ¿Por qué les das falsas esperanzas?"
Nahual volteó a ver al dragón y Grekko vio por primera vez las lagrimas en los ojos del lobo. En la cara de Nahual había dibujado un gran dolor. Grekko sintió un nudo en su garganta.
"Porque me han hecho sentir que me necesitan por mas que mi habilidad para matar" respondió Nahual, porque me consideran su amigo, porque sabiendo por que estoy aquí sigues tratándome como un invitado. Me has dado mi primer sueño tranquilo en años, ¿Cómo podría lastimarte a ti o a ellos ahora? Daría mi vida por ti si tuviera que hacerlo"
Nahual cayó de rodillas y comenzó a sollozar. Grekko gentilmente levantó a Nahual y sus ojos se encontraron por un momento. Los ojos de Grekko atraían a Nahual mas que nunca, Grekko limpió las lagrimas de Nahual.
"Esta bien" dijo el dragón "Siento lo mismo por ti"
"Pero..."
"Shhh, hablaremos después"
Grekko abrazó fuertemente a Nahual, Nahual sintió el corazón del dragón latiendo a través de sus calidas escamas, el lobo levantó su mirada y unió sus labios con los de Grekko. Grekko devolvió el beso y sus manos acariciaron la espalda de Nahual.
"Vamos a mi cuarto" susurró Grekko.
Nahual estaba sentado en la cama de Grekko, observando mientras Grekko se quitaba los pantalones, el dragón se inclinó para quitárselos, dándole a Nahual la oportunidad de admirar su redondo y musculoso trasero. Grekko estaba frente a Nahual ahora, el pene del dragón comenzaba a endurecerse y asomaba a través de su abertura, Nahual vio que los testículos de Grekko habían crecido considerablemente, la primera ves que los vio eran pequeñas esferas apenas visibles entre las piernas del dragón, ahora eran casi del tamaño de una pequeña mandarina, Grekko siguió la mirada de Nahual y explicó.
"Crecen así cuando estoy excitado"
Nahual extendió su mano izquierda y los acarició, arrancando un gemido de Grekko, el lobo usó su otra mano para acariciar las rojas escamas del estomago de Grekko mientras se inclinaba y pasaba su lengua por la abertura del dragón, haciendo emerger mas de su verga, entonces se movió un poco mas abajo y bañó con su lengua los testículos del dragón, Grekko seguía gimiendo y acariciando las orejas de Nahual, Nahual llevó a Grekko hacia la cama y lo hizo acostarse, Grekko abrió sus musculosas piernas para darle mejor acceso a Nahual, Nahual acercó su cara poco a poco, lentamente paseando su lengua por el orificio anal de Grekko, la verga de Greco estaba completamente erecta, balanceándose y goteando sobre el estomago del dragón. Nahual reemplazó su lengua con un dedo y movió su hocico hacia el incitante polo de carne negra. El lobo gentilmente lamió la punta antes de engullir el miembro completo, la nariz de Nahual tocó la abertura del dragón y el lobo se quedó así por un momento, inhalando el fuerte aroma masculino y sintiendo cada vena del palpitante órgano en su boca. La verga de Nahual aun estaba dolorosamente confinada en sus pantalones de cuero, Grekko sintió esto y usó su cola para bajar los pantalones de Nahual, La verga de Nahual salió y se hinchó aun mas, el bulbo en su base comenzó a llenarse de sangre. Grekko continuó acariciando la verga del lobo con su cola y Nahual comenzó a subir y bajar su cabeza, chupando ávidamente la verga del dragón. Grekko sintió que su orgasmo se aproximaba y levantó la cabeza de Nahual de su verga.
"Quiero probarte" dijo.
Nahual se movió de modo que su verga quedara encima de la cara de Grekko, unas cuantas gotas de líquido cayeron sobre la nariz de Grekko antes de que comenzara a lamer la puntiaguda verga del lobo, luego abrió su boca y dejó que la verga de Nahual entrara hasta que el bulbo en su base tocó sus labios. El drago comenzó a chupar y Nahual comenzó a mover su cadera, ambos continuaron chupando por algún tiempo, Grekko sintió que llegaba a su clímax de nuevo y gentilmente apretó las nalgas de Nahual para hacerle saber que estaba cerca, Nahual sintió esto y chupó con mas fuerza, masajeando los testículos del dragón, Grekko comenzó a estremecerse y clavó sus garras en las nalgas de Nahual mientras los primeros chorros de caliente semen de dragón salían de su verga hacia la garganta de Nahual. Nahual sintió el calido y dulce liquido y las garras que rascaban su trasero y también el explotó, Grekko dejó de chupar, cerró su mano alrededor de la verga de Nahual detrás del bulbo y cerró sus labios alrededor del grueso miembro, dejándolo pulsar y llenando su boca con calido semen, Nahual sintió que el orgasmo de Grekko disminuía y saco la verga del dragón de su boca, y al mismo tiempo retiraba su verga de la boca del dragón. Nahual se acomodó en la cama para que estuvieran cara a cara, se besaron apasionadamente, compartiendo el semen restante en sus bocas, se abrazaron y permanecieron así por unos minutos, la verga de Grekko ya se había retirado a su abertura, el bulbo de Nahual comenzaba a encogerse también.
"¿Recuerdas el paquete que Mary te dio el día que nos conocimos?" preguntó Nahual.
"Si"
"¿Qué hiciste con el?"
"Lo dejé en la sala, en el marco de una ventana"
Nahual se levantó y salió del cuarto, Grekko sonrió al ver su verga semi erecta balanceándose y las marcas rojas en sus nalgas, el lobo regresó unos segundos después con el paquete en sus manos, la verga de Nahual ya se había retirado a su vaina. El lobo le entregó el paquete a Grekko, el dragón lo abrió y sacó un collar de plata con una figura de una cabeza de lobo.
"Lo compré solo para que Mary me dijera donde encontrarte" dijo Nahual "pero ahora quiero darle el uso apropiado."Nahual tomó el collar de las manos de Grekko y lo cerró alrededor del cuello del dragón.
"Seria la persona mas feliz del mundo si me dejaras envejecer junto a ti" dijo Nahual.
"Por supuesto" dijo Grekko "moriría antes de dejarte ir"
Nahual sintió que podía llorar por segunda vez ese día, pero antes de que eso pasara regresó a la cama y abrazó a Grekko. Algunos minutos después Grekko estaba profundamente dormido junto a Nahual, el lobo estaba mirando al techo, pensando que finalmente había encontrado la paz que había estado buscando, entonces recordó las palabras que había dicho exactamente hace dos semanas.
"Tendrás noticias mías en seis semanas, si no, significa que he fallado..."
CONTINUARÁ...